La educación inclusiva como derecho humano
Autores: Ignacio Calderón-Almendros, Universidad de Málaga y Gerardo Echeita-Sarrionandia, Universidad Autónoma de Madrid
Este artículo es una traducción de Inclusive Education as a Human Right, publicado el 22 de noviembre de 2022.

Resumen.

La educación inclusiva ha sido reconocida internacionalmente como un derecho humano fundamental para todos, sin excepción. Este reconocimiento internacional pretende hacer frente a la dramática desigualdad existente en las sociedades actuales, ya que el disfrute del derecho a la educación para muchas personas desfavorecidas depende de que ésta sea inclusiva. El reconocimiento y disfrute de este derecho requiere un análisis detallado del significado y alcance de la educación inclusiva, así como de las barreras y los principales retos a los que se enfrenta. La consideración de la educación inclusiva como un derecho, con sus implicaciones morales y legales, se ha conseguido en gran medida gracias a la incidencia política de diversos movimientos asociativos de personas con (dis)capacidades.

Paradójicamente, muchos alumnos con discapacidad siguen siendo segregados sistemáticamente en escuelas y aulas especiales, lo que vulnera su derecho a la educación inclusiva. Por tanto, hay mucho que aprender de esta contradicción. También queda mucho por hacer para garantizar la igualdad de dignidad y derechos de las personas que sufren exclusión y segregación asociadas al género, la clase social, la orientación sexual, la nacionalidad, la etnia, la capacidad, etc.

Para ello, es importante delimitar conceptualmente la domesticación neoliberal de un término profundamente transformador. Es necesario comprender la evolución histórica del reconocimiento de la educación inclusiva como derecho humano. También es necesario considerar la solidez de las pruebas científicas que lo sustentan para contrarrestar ciertas opiniones que cuestionan su pertinencia, a pesar de haber sido refutadas con solidez. Desenredar estos nudos permite un análisis más situado y realista para abordar algunos de los problemas que hay que afrontar en la implantación de la educación inclusiva. Se trata de un esfuerzo social y político que debe romper con la lógica orientada al mercado en los sistemas educativos. Implica aceptar que es un derecho fundamental que debe garantizarse mediante la responsabilidad colectiva.

La educación inclusiva como derecho humano.

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